[Del lat. uncía]. Nombre que recibían distintas monedas acuñadas en la Península desde la Alta Edad Media, y cuyo peso, que oscilaba entre 27 y 29 g, equivalía en general a la unidad de peso homónima. Las primeras acuñaciones de onzas conocidas son las del reino de Castilla, donde equivalía a 28,75 g, la octava parte del marco de Castilla, y 8 sueldos de valor (unos 320 reales). En la Corona de Aragón se conocen diversas acuñaciones, entre ellas las de la onza de Barcelona (ss. XIII-XIV), que equivalía a 60 sueldos, o la del reino de Aragón, que equivalía también a la octava parte del marco aragonés. Conocida como “onza de oro”, por haberse utilizado ese metal para su acuñación, se emitió desde época de Felipe III (1598-1621) hasta Fernando VII (1808 y 1814-1833). Las distintas acuñaciones presentaban también un peso aproximado de 27 g y un valor de 8 sueldos, excepto las emitidas por José I (1808-1813), cuyo valor se hizo equivaler en reales de vellón al de...